Nosotros

Nuestra historia inicia el día 10 de diciembre del año 2007, con el ánimo de tener una administración independiente, y con el objetivo de lograr unos altos estándares de calidad y servicio. Monseñor Tulio Duque Gutiérrez, Obispo de la Diócesis de Pereira puso al servicio de la región la Fundación Prados de Paz; unos años después con el apoyo de Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, quien con su liderazgo y compromiso ha fortalecido los servicios funerarios que brinda la Fundación Prados de Paz en provecho de toda la comunidad.

La Fundación Prados de Paz, es una institución de la Iglesia Católica, que ofrece el servicio de acompañamiento espiritual, humano y funerario a los familiares y allegados de las personas fallecidas en el Eje cafetero.

Ser una Empresa del Sector Funerario en la ciudad de Pereira capaz de consolidarnos como la mejor opción para el acompañamiento espiritual, humano y funerario en el momento del duelo, en el eje cafetero.

Brindar el adecuado acompañamiento espiritual, humano y funerario a los familiares y personas cercanas de los fallecidos de la región.

Administrar los cementerios San Camilo y Prados de Paz, la Funeraria y el Horno Crematorio entregados por la Diócesis de Pereira en consignación.

Proporcionar a la comunidad en general, bóvedas y lotes para inhumar y exhumar sus seres queridos.

Proporcionar Osarios y Cenizarios donde se puedan ingresar los restos y las cenizas de las personas fallecidas.

Mantener el servicio de las salas dignas y proporcionar las honras fúnebres para los fallecidos y sus dolientes.

Cumplir con la normatividad y requisitos exigidos para la prestación de servicios funerarios.

Brindar un óptimo servicio funerario con un adecuado acompañamiento cálido y humano a las familias.

Comprometidos a la prestación de nuestros servicios de manera transparente y confiable, con un comportamiento integro por cada uno de nuestros colaboradores.

Manteniendo buenas relaciones interpersonales, comerciales y legales con nuestros colaboradores y clientes externos orientadas al trato formal, respetuoso y cordial con cada uno de ellos.

Caracterizándonos por nuestro servicio por su trato humano, cálido y único.

Generando el adecuado acompañamiento espiritual, humano y funerario antes, durante y después de la prestación de nuestros servicios fúnebres.

Fundamentados en tratos amables, comprensivos y dignos, contamos con un equipo comprometido en garantizar una despedida acorde a las necesidades aceptando las creencias, valores y decisiones de los familiares.